Jacobo Christensen, de padre danés y madre española, comienza a sostener un violín con la guía de Juan Vicente Sanchís cuando todavía no ha cumplido tres años. Iniciado en el mundo de la música por su madre, la soprano Gloria Fabuel, es alumno del violinista Vicente Balaguer. Se forma además con Catalina Roig, Sergey Ostrovsky, Mikhail Spivak y Boris Belkin, con quien estudia en la Accademia Chigiana en 2016. Recibe consejos del violinista Ivrin Gitlis y actualmente se perfecciona con los maestros Yuri Volguin y Zakhar Bron. Estudia también con el compositor Jesús Debón y el actor y director Alejandro Carballo. En abril de 2013 obtiene, con solo trece años, el Primer Premio en el Concours International de Jeunes Musiciens Crescendo de Ginebra. Consigue después primeros premios en el Concurso Internacional de Violín Pozuelo de Alarcón (Madrid), el Concurso del Festival AIMS de Solsona (Lleida) y el III Concurso para Jóvenes Intérpretes de Canet (Valencia). A los cinco años de edad comienzan sus actuaciones en público. Desde entonces ofrece conciertos en San Miniato y Siena (Italia, 2011, 2016), Skive, Thisted, Nykoebing (Dinamarca, 2011, 2014, 2016), Ginebra (Suiza, 2013) y distintas ciudades españolas. En 2015 realiza una gira de conciertos en California, acompañado por la Dana Point Symphony Orchestra, bajo la dirección de Ignazio Terrasi. En diciembre de 2015 realiza, junto al pianista Carlos Apellániz, su primera grabación discográfica bajo el título: Violín. Jacobo Christensen.
Suena hoy la Danza Húngara nº 1 Brahms.
Textos extractados parcialmente de su facebook
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