El año pasado sonó: Demis Roussos
También en este día podrían sonar aquí: Alejandro Algara, Alicia Keys, Antonio Carlos Jobim, Benny Golson, Chris Kenner+, Evan MacColl, Juventino Rosas, Rutland Boughton+, Sleepy John Estes, Tom Jobim, Witold Lutoslawski . Y alguna vez lo harán
El 25 de Enero de 1939 nace Giorgio Gaberscik (conocido como Giorgio Gaber) en Milán. Cantautor, actor y comediógrafo italiano. Cariñosamente llamado "el Señor G" por sus seguidores, fue también un guitarrista de valía, entre los primeros intérpretes de rock and roll en italiano, entre 1958 y 1960. Su actuaciones como autor y actor teatral son muy apreciadas. Junto con Sandro Luporini, inició el género del teatro cantante. Se le ha dedicado el reformado auditorio del piso 31 de la Torre Pirelli de Milán. Un incidente físico en el brazo izquierdo (que le causa una ligera parálisis en la mano, hacia los nueve años de edad le obligó a realizar una actividad constante para conseguir la reeducación motora; como el hermano mayor toca la guitarra, Giorgio también aprende a tocarla. La idea da buenos resultados, tanto desde el punto de vista médico como del artístico. Ya de adulto, Gaber dirá: "Toda mi carrera nace de esta enfermedad". A la edad adolescente todavía no piensa en cantar, es básicamente un instrumentista. Vive la música como un divertimento, como un pasatiempo, siendo su actividad principal la de estudiante. También busca aprender de los músicos italianos; en Milán puede oír en vivo a Franco Cerri, que aparece a menudo en la Taverna Messicana. Tras dos años de veladas, entre música ligera (para ganar algo de dinero) y jazz (por amor al arte) entra en los Rock Boys, el grupo de músicos de Adriano Celentano. En este periodo conoce a Luigi Tenco, mudándose de Milán a Génova. Con él forma su primer grupo, Los Rocky Mountains Old Times Stompers (nombre completo del grupo) que se exhiben en el conocido club milanés Santa Tecla. Gaber y Tenco componen juntos algunas canciones, construyendo paralelamente una intensa amistad. Nanni Ricordi, director artístico de la homónima casa discográfica se fija en él y lo invita a hacer una audición. Así comienza su carrera como solista, con la grabación para la recién nacida Dischi Ricordi, rama de la histórica casa discográfica de música ligera, de cuatro canciones, dos originales en italiano Ciao ti dirò (rock) y Da te era bello restar (lento) y dos éxitos americanos, Be-Bop-A-Lula y Love Me Forever. Sobre la etiqueta del 45 revoluciones por minuto se puede leer «Giorgio Gaber y su Rolling Crew». Por primera vez aparece su nombre artístico. A Gaber le atrae la canción francesa: oye a los chansonniers de la Margen izquierda parisina, en que reconoce una consistencia cultural, un cuidado en los textos, que falta en la música ligera italiana. “Mi maestro fue Jacques Brel”. Gaber, al igual que Gino Paoli, Sergio Endrigo, Umberto Bindi, Enzo Jannacci y Luigi Tenco, busca un punto de equilibrio entre la influencia americana y la canción francesa. Lo encuentran todos ellos en la canción de autor italiana. Los primeros cantautores italianos nacen en este tiempo, y Gaber está entre ellos. En los años sesenta Gaber participa en cuatro ediciones del Festival de la Canción de San Remo con: Benzina e cerini, Così felice, Mai, mai, mai (Valentina), ... E allora dài! . Un personaje polifacético que, además de participar en festivales de la canción, participa en la comedia musical western para la RAI: Non cantare, spara, presenta un programa de variedades televisivo: E noi qui, crea el género del teatro cantante, un espectáculo temático con canciones que lo desarrollan, con monólogos y cuentos intercalados, continúa con la crítica a la sociedad de los años noventa, evidente en canciones como Il potere dei più buoni (El poder de los más buenos) y en Il conformista, canción de la que Adriano Celentano hará una versión propia. Inicia la creación del nuevo disco Io non mi sento italiano (Yo no mi siento italiano), que, sin embargo, se publica como obra póstuma.
Participó también en el IV Festival de Mallorca con esta bella canción, olvidada como él: Ciao, cia, ciao
Y para no dejar en el olvido su faceta de activista, crítico y revulsivo de la política y la sociedad que desarrollaba en sus espectáculos teatrales, podemos escucharle en Il conformista que, como dice la canción, "se parece mucho a nosotros"
